Zoología. Peces. Los Tres Reinos de la Naturaleza. Tomo 5. Página 257.

ICTIOLOGÍA O TRATADO DE LOS PECES. 257

acanturo sangrador.

(Acanthurus phlebolomus, Valen.)

Existe en las colonias francesas otra especie de acanturo, que los colonos suelen confundir con el anterior dándole el nombre común de cirujano , pero que Mr. Valenciennes distingue con el de sangrador.

Diferenciase particularmente de la primera especie en que sus piezas operculares están profundamente estriadas, y en las de la espalda el escapular no lo está tanto como el humeral: la caudal no se presenta tampoco tan escotada, sus puntas no son tan agudas, y sobre todo la del lóbulo superior no sobrepasa á la otra. Al extenderla las mas de las veces parece cuadrada.

Conservado en el alcohol este segundo acanturo se distingue también del primero en cuanto á su color. Todo el individuo parece teñido de pardo oscuro, menos la pectoral, cuya mitad exterior aparenta ser de amarillo pálido.

Existen individuos de esta especie procedentes de la Martinica, del Brasil, de la Habana, de Guadalupe, de Santo Domingo y de Nueva York.

A esta segunda especie debe también en concepto de Mr. Valenciennes referirse el acarauna de Mar-grave.

Según un diseño bastante exacto presentado por Mr. Poey, puede inferirse que el barbero de Parra debe pertenecer á esta especie en particular con arreglo á su color enteramente pardo azulado; pero en realidad hay que advertir que el diseño representa su perlil demasiado corlo y la caudal demasiado cuadrada.

acanturo azul.

(Bloc.)

Producen ademas las Antillas otra especie de acanturo fácil de distinguir de los dos anteriores, tanto por las formas como por su hermoso color azul.

Es mucho mas alto en proporción; particularmente su nuca puede llamarse elevadísima, de manera que el ojo queda situado en medio de la distancia de la dorsal y la boca. Su perlil, algo convexo delante el ojo, se hace ligeramente cóncavo un poco mas abajo tomando la curvatura de una S. Las puntas de su caudal mas agudas que en la segunda especie, lo son menos que en la primera; la superior excede á la inferior, pero muy poco.

Este acanturo, según los que se han visto en París, procedentes de la Martinica, Puerto Rico y Santo Domingo, parece ser de un color pardo oscuro que tira á purpúreo. En muchos individuos se ven veinte y cuatro ó veinte y cinco líneas estrechas y azuladas y poco regulares, que recorren longitudinalmente los costados del cuerpo. La dorsal y la anal están coloridas por líneas oblicuas, alternativamente azules y purpúreas; las pectorales tienen un color anaranjado y las ventrales un azul oscuro y negruzco : la caudal sigue el color del cuerpo con un festoneado azul oscuro. Mr. Plec dice que durante la vida del individuo, su verdadero color es un hermoso azul; que sus aletas son del mismo matiz, pero inclinándose al violáceo y que su espina está rodeada de membranas amarillas en su base.

Este acanturo es indudablemente el turdus rhom-boididis de Catesby. Por lo menos asi puede naturalmente inferirse en vista de la forma y color del diseño en que aquel autor lo representó.

Bloch, en su Sistema postumo, convirtió el turdus en el acanturo de que nos estamos ocupando.

En San Tomás lo llaman doctor : en Santo Domingo cirujano azul, y su carne, según dice Mr. Ri-

TOMO v.

cord , tiene poca estimación y no sirve de alimento sino á la clase menesterosa.

Los mares de la India oriental, alimentan muchas mas especies de acanturos que los del Nuevo Mundo, y entre ellos hay algunos que por el brillo de sus colores y la precisión con que están distribuidos son fáciles de caracterizar. El número de los radios espinosos del dorso que en la mayor parte de los individuos es nueve, pero que en cierto grupo se reduce á cuatro ó cinco, sirvió al continuador de esta historia de base para la distribución , formando ademas una subdivisión de las puntas de la caudal y de su respectiva longitud.

Siguiendo este orden principió por los acanturos, en los cuales la ventral aparece truncada, ó como ligeramente recortada en forma de media luna.

acanturo hepate.

(Acanthurus hepatus, Bloch; Teuthis hepatus, Lin.; Acanthure teutis, Lacép.; Hepatus, Gronuv.)

Entre los que presentan colores mas irregulares, distingüese desde luego el segundo hépate de Gronovio , o sea el Teuthis hepatus de Linneo, ó el acanturo teutis. Si se tuvieran en consideración los sinónimos alegados por estos autores , esta especie comprendería peces de las Indias y de América; per» remontándose al origen se ve que el diseño de Seba que constituye el principal objeto de sus citas, es tanto por el contorno como por los colores, una especie enteramente distinta de la de Catesby , que solo representa el acanturo clasificado en esta historia con el nombre de azul, y que nada tienen de común aquellas especies sino el aguijón en cada lado de la cola, signo característico del género.

La descripción del mismo Gronovio, en la cual no designa los colores, está tan particularmente ceñida á los rasgos genéricos, que no es fácil decijir á qué especie se refiere decididamente; mas como asegura que el diseño ejecutado por Seba es excelente, y hay fundados motivos para creer que el individuo que le sirvió de original fue un individuo disecado de la especie que se está describiendo, que existia en el Museo del Stadbouder, creyó Mr. Valenciennes poder alirmar que el pez á que Gronovio se refiere no es mas que un teuthis hepatus.

Es un pez procedente de la India, y Gronovio no lo supuso del Mediterráneo , sino porque creyó que era el teserino de Rondelet; suposición enteramente desnuda de fundamento.

Linneo y Lacépéde , creyendo que el pez diseñado por Seba era el de Catesby, creyeron que habitaría en las aguas de la Carolina, lo mismo que en las de Amboine.

Bloch, en su Sistema postumo, estableció la diferencia denominándolo acanthurus cwruleus, sin dejar por eso de alirmar en el articulo hepatus , que asimismo suele encontrarse en las islas de Bahama. Dice que también existe en el Japón , mas sin aducir razones que lo corroboren. Finalmente, Gronovio cita ademas como pertenecientes á este pez, dos dibujos de Valentín que nada tienen con él de común, mas que los caracteres genéricos.

El óvalo del cuerpo del hépate, desde el extremo de la dorsal y la anal sin incluir la cola, tiene exactamente una longitud doble de la altura , y una tercera parte de esta mide considerándolo en su anchura. El perfil desciende oblicuamente, y por una linea ligeramente convexa á su parte superior, y en seguida marcha casi recto: la longitud de su cabeza sin incluir el cuello, no es mas que una quinta parle menos que la altura. Cubren todas las partos de su cuerpo y cabeza, escamas diminutas y duras que mas bien se parecen á las durezas de los escualos, que escamas de peces comunes. Miradas con el lente no son mas que