Naturaleza de Aragón > Buffon > Los Tres Reinos de la Naturaleza
ictiología o tratado de los peces.
adquirir mas volumen: luego se prolongan y por último presentan dos puntitos negros en su superficie que andando el tiempo serán los ojos del futuro pez. Los fetos están muy simétricamente dispuestos en el saco membranoso que los contiene y cada cual está separado de los demás por su envoltura particular. Scfionevelde habla de vasos que en su concepto sor. á manera de vasos umbilicales, pero no son sino simplemente vasos sanguíneos del ovario y de la especie de útero en que están encerrados los fetos. Si se abre el vientre de la madre cuando estos se hallan ya próximos á salir á la luz , se mueven velozmente y nadan con rapidez. Algunas veces pasa de trescientos el número de los que produce cada vez una sola hembra.
El fin de esta gestación ocurre en el solsticio de invierno, y entonces su abdomen vuelve á contraerse de manera que ya no es posible distinguir el sexo no siendo por el color que es siempre mas ceniciento en la hembra que en el macho. Estos por el contrario son mas pequeños y no tan comunes como las hembras. Unos y otros se alejan de las costas desde el solsticio de verano, retirándose á las grandes profundidades y permaneciendo ocultos en las hendiduras de las rocas.
Con ayuda del microscopio puede seguirse el curso de la circulación de la sangre en los individuos recien nacidos.
Dice Schonevelde que la carne de estos peces cuyo alimento por lo general son otros pequeños pececillos gusanos y diminutos mariscos es dura y de mal sabor particularmente en la época del celo. Low por el contrario la presenta como mucho mejor y mas crasa que la de las demás blenias. Las aves acuáticas son sus mas encarnizados enemigos.
GRANDES ZOARCES DE AMÉRICA.
Mr. Mitchill dio á conocer dos peces de los Estados Unidos, que en su concepto deben figurar entre las blenias, pero en realidad pertenecen exclusivamente al género zoarces. Tales son el rodomesto Zoarces de orillo (zoarces fimbriatus) y el zoaiicls de GRONOino. Los individuos de la primera de estas dos especies, que Valenciennes tuvo el placer de observar tenían dos pies y dos pies y medio de largos: sus caracteres eran los genéricos y no fue posible establecer el limite de las diferencias entre ambas especies por haber sido extraído el ejemplar perteneciente á la segunda, del estómago de un gado y no hallarle ya por consiguiente en buen estado de conservación.
GENERO ANARRICO
A pesar de su mayor volumen, de la falta completa de ventrales, y de la formación extraordinaria de los dientes de estos peces es imposible no echar de ver las relaciones que los unen con las blenias. Son del todo semejantes á estas en lo tocante á las proporciones y forma de la cabeza , disposición de las aletas y delgadez de lis escamas constantemente ocultas bajo una mucosidad espesa y resbaladiza. La misma afinidad se encuentra en lo relativo á su organización interior.
Viven los anárricos en los mares del Norte. Mon-sieur Agassis ha colocado entre ellos una especie traida del Atlántico por Mr. Spix, lo cual podria hacer creer que avanzan también algo hacia el Sur, mas al tratar de aquel pez se liaran ver las diferencias caracteriscas que deben alejarlo de los anárricos.
ANARRICO LOBO.
(Lin.)
Este pez es tan abundante en los mares del Norte, que ha sido observado por todos los autores de viajes tomo v.
337
en las regiones septentrionales: asi es que Olafsen, Strom y Pontoppidam han hablado de él representándolo en diseños mas ó menos exactos.
Su cuerpo es largo y compromido: su cabeza gruesa 5 redonda y el cráneo algo aplanado: el perfil desciende rápidamente redondeándose, y al llegar sobre la boca sobresale un poco formando como una pequeña tuberosidad. Los ojos son redondos: el orificio posterior de la nariz, situado al nivel del borde inferior del ojo ocupa exactamente el centro de la distancia que hay desde aquel al hocico , cuyo extremo es pequeño , redondo y sin reborde. En torno del ojo se ven ocho ó diez poros situados á igual distancia unos de otros.
La boca va descendiendo hasta llegar al punto que caeá plomo del borde vertical del ojo, á una distancia vertical igual á tres diámetros. Los labios son carnosos particularmente en los lados. Ni el maximar ni los suborbitales no se presentan al exterior: y apenas puede distinguirse la curva redonda del preopérculo bajo la gruesa piel que lo cubre.
Los dientes de este pez no se parecen á los de ningún olro: no están inmediatamente adheridos ni á la mandíbula ni á los huesos del paladar, sino á una | especie de apéndices óseos, cónicos ó liemiesférícos que están adheridos á dichos huesos por una sutura que en ciertas épocas les permite poderse desprender fácilmente. En la cima de estos tubérculos óseos es donde está realmente incrustado el verdadero diente, pequeño, cónico, mas ó menus agudo, y compuesto de sustancia córnea y esmalte. Los que ocupan los lados d« la mandíbula inferior de los palatinos y el vómer no son tan agudos como los demás y están incrustados en gruesos tubérculos hemisféricos. Los dientes laríngeos son los mas pequeños, cónicos y puntiagudos.
Las pectorales están unidas al tercio inferior del tronco. Carece absolutamente de ventrales. La dorsal se extiende desde el punto paralelo á la base de la dorsal, hasta la anal, redondeándose al llegar á ella y tocándola con su último radio. La anal principia en frente del radio vigésimo octavo de la dorsal y es h mitad menos alta que ella. La caudal es redonda. La piel del anárrico no presenta por escamas sino unos pequeños puntos igualmente esparcido?, y que no sobresalen de la gruesa piel en que están envueltos, pero separados de ella y mirados con el microscopio se ve que son unas verdaderas escamas redondas y ligeramente estriadas en radios alrededor de su centro. La cabeza , las aletas y el pecho están enteramente desnudas. Tampoco se ve línea lateral.
El color dominante del anárrico es pardo oscuro verdoso; pequeñas mane has negruscas uniéndose entre sí forman sobre su cuerpo nueve ó diez anchas fajas verticales. En la dorsal se ven algunas lineas irregulares negras, que se remontan hacia atrás en sentido algo mas oblicuo que los radios cruzándolos en ángulos agudos.
Habita este pez el Océano de la Europa septentrional y alguna vez avanza mucho hacia el Norte Suele aparecer en las costas del canal de la Mancha, pero es mas común en el mar de Alemania y en las costas de Noruega. También es muy abundante en las de Inglaterra y su color está sujeto á algunas variaciones. Por ciertos pasajes de la obra de Eggede puede inferirse que también suele presentarse en las costas de Groelandia.
Su largura por lo general es de tres á cuatro pies y su peso pasa algunas veces de veinte libras. Cierto es que Gronovio supone hallarse en los mares del Norte individuos de este género que tienen hasta quince pies de largura, pero según Mr. Valenciennes es muy dudoso que eso sea verdad, por mas que Mr. Lacépéde lo confirma añadiendo que este pez es uno de los monstruos mas horribles del Océano.
22