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gíó para obtener datos positivos sobre este particular, contestó diciendo que allí no se conocían mas que dos especies de escombros: el común que se llama aour-ncou y otro de vejiga denominado aourneoubias.
Mr. Risso hasta en la segunda edición de sus obras no conoce tampoco mas que dos especies , el escombro ordinario ó sea aurion de los de Ni/a y un escombro de vejiga natatoria,que es el cavaluco ó cavaluca del mismo punto.
GENERO ATÚN.
El género de los alunes, que también comprende los bon i talos los bercas y los bonitos de vientre listado se diferencia del de los escombros por una disposición notable de sus escamas del pecho que son mayores y menos brillantes que las otras y forman alrededor de aquella parte del tronco un coselete que en la parte posterior forma varios recortes. Otro carácter consiste en que la primera dorsal se prolonga hasta muy cerca de la segunda. Las falsas aletas son menos numerosas que en los escombros; pero no presenta espina libre delante de la anal. La cola tiene en cada uno de sus lados por la parte mas delgada, ademas de las pequeñas crestas observadas en los escombros y mas hacia adelante , una prominencia cartilaginosa horizontal, longitudinal y cortante en ferina de quilla, mucho mas saliente que aquellas crestas.
atún vulgar.
(Triynnus vulgaris, nob. scomber Thi/nnus, Lian).
El atún vulgar es un pez tan grande y hermoso como agradable y útil; su forma general es poco mas ó menos como la del escombro, no siendo las mayores dimensiones y redondez de su región pectoral, y su hocico que es mas corto.
Aristóteles supone que la hembra del atún se diferencia del macho por una aleta que tiene mas que él en el vientre, y á la cual se le da el nombre de apha-rens. Es imposible entender lo que quiso decir.
El atún es uno de los mayores peces del mar. Aristóteles hace mención de uno que pesaba quince talentos ó sea doscientas libras, y tenia dos codos y un palmo de longitud desde una á otra punta de la aleta de la cola, hay que advertir que esta dimensión es con arreglo á la enmienda hecha por Gaza y con arreglo á Plinio; pues la mayor parte de los manuscritos de Aristóteles dicen cinco codos y Hardouin como muy aficionado siempre, á las paradojas, creyó que quien debia ser corregido era Plinio. Cinco codos de longitud en el sitio indicado cualquiera que sea el valor que se atribuya á esa medida, darían al pez una longitud total, por lo meaos de veinte á veinte y dos pies.
En Cerdeña llaman scampirro, derivación de scom-ber al atún que pesa menos de cien libras, calificándolo con la denominación de medio atún (merzofono), desde cien á trescientas libras: los de mil libras de peso no son muy raros en aquellas costas. Cetti supone que alguna vez se cogen individuos de 1,800 libras y añade que los mayores son siempre del género masculino , lo cual según su propia observación seria contrario i lo que se observa en la mayor parte de los peces.
No parece que en nuestras costas adquiera tal tamaño. Duhamel hace mención de atunes de cinco pies de longitud y que pesaban muchos quintales ; mas no dice haberlos visto. El que sirvió para descripción no tenia mas que tres pies cuatro pulgadas d ¦ largo , y el autor de esta obra se refiere á un individuo de solo tres pies de longitud.
La pesca del atún data de la mas remota antigüedad. Enlidemo atribuía á Hesiodo ciertos verso» en que
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onocida con el nonbre de aourneon-bias, y de Niza donde se le da la denominación de cmaluco. En mayo y noviembre se cogen en los sitios que acabamos de indicar numerosas bandadas de esta especie de escombros. Su peso individual llega escasamente á cuatro libras y su carne es blanquisca y muy inferior á la del escombro común que en Niza se llama auriou.
Desde el siglo XVI los ictiólogos habian distinguido en el Mediterráneo ademas del escombro común, que lo consideraban como el scomber de los antiguos, una ó dos especies inmediatas entre las cuales creyeron ver el colias.
Indudablemente serán estas las mismas de las que acabamos de hablar; pero no es f >cil reconocerlas en las descripciones incompletas que aquellos autores nos dejaron.
Belon nos dice que los de Semmos llaman eolias á una especie mas pequeña de escombro, en la cual no ha podido descubrir mas diferencia que la dimensión y añade que los marselleses la llaman cogniol. Mas adelante sigue diciendo que los genoveses dan el nombre de lacerto á una clase de escombro cuyo dorso es mucho mas verde que el del escombro común, y que en su concepto este es el verdadero colias. Infiere, pues, que Belon conoció dos especies distintas de la vulgar.
Rondelet cree también que el cogniol de los Marselleses es el colias, pero en su descripción le da mayores dimensiones que al escombro, y dice que las ¡incas de su dorso son cortas y están marcadas con puntos negros. Añade ademas que su cráneo es tan transparente que permite que al través se vean el cerebro y los nervios ópticos, y por último, lo pinta revestido de pequeñas escamas, las cuales no concede al escombro.
Según Salviano el codas tiene el cuerpo algo mas grueso que el del escombro , y provisto de algunas pequeñas escamas; el escombro presenta en el dorso manchas azules y ondeantes, y el colias tiene líneas oblicuas y lívidas en los costados.
Dice Cetti que en Cerdeña suelen vender con los escombros otra especie, cuyos colores verde y azul son mas vivos, y á la cual dan allí el nombre de lacerto , en tanto que llaman pisara al verdadero colias. De estas circunstancias inlíere aquel observador que el lacerto es el colias, pero confiesa que no lia hecho particular eiámen del asunto.
Gmelin, Bloch y Mr. de Lacépéde han salido del paso con facilidad: los dos primeros reuniendo indistintamente los datos que acabamos de dar sobre esta especie de scomber colias fundada en el lacerto de Cetti, y el último considerando todos esos escombros, sean codas ú otros, como simples variedades del escombro común.
A nosotros nos parece probable que el colias de Rondelet , y el lacerto ó colias de Cetti son precisamente nuestras dos especies de escombros de vejiga natatoria , este último, esto es el de Cetti, será la pequeña especie verde, descrita por Laroche, y el otro, la especie mas grande y de mayores escamas representada por Rondelet.
Esa eolias ó lacerto de Cetti, y ese neumatoforo de Laroche serán también el lacerto de Belon.
I'or el contrario el colias de Rondelet con sus grandes escamas, sus pequeñas líneas y sus manchas, el cogniol de los marselleses de su tiempo, será eleolias de los de Lemmios, citado por Belon y que este no podía distinguir del escombro. Pero decir cual de los dos era el eolias de los antiguos, es poco menos que imposible en la actualidad como ya lo hemos hecho notar en el artículo de! escombro común.
Debemos añadir que hoy son desconocidos los nombres de cogniol ó coigol en Marsella. Mr. Polídoro Rom, sabio naturalista y conservador del Museo de aquella ciudad . á quien e! autor de esta obra se diri-iomo v.